Por Jesús Olivas Figueroa
Haber, pongamos en el contexto real del estado la aseveración que Guillermo Padrés hizo en la reunión estatal de regidores surgidos de Acción Nacional, un entorno que no beneficia del todo al mandatario y por tal razón, su visión futurista, suena como que fuera de lugar, su "sueño", está desfasado de la realidad que envuelve a Sonora gracias a su gestión.
Sí, decirles a los ediles panistas que si ponen de su parte para que cada uno de los municipios salga adelante, a cambio de que él hará lo propio pero para conseguir la candidatura albiazul a la presidencia de la república, sonó soberbio, altanero, fuera de la realidad, sí, "soñador".
Y es que su trabajo al frente del ejecutivo, raya en la mediocridad como para aspirar a tal puesto político, su chamba ha dejado mucho que desear, el fuego consume a Sonora en todos los frentes, el transporte público, el acueducto, las manifestaciones sociales y los enfrentamientos políticos faltos de mano izquierda, son sólo algunos ejemplos.
Señor gobernador, primero lo primero, los sonorenses aspiramos a que nos arregle el transporte, a que arregle el problema del acueducto sanando las heridas entre cajemenses y hermosillenses, que saque a la entidad en el tema de economía de la terapia intensiva en la que se encuentra y sobre todo, deseamos que corra de una vez por todas, a esa gente de su circulo cercano que le ha hecho tanto daño, esos que usted calificó como amigos.
Luego entonces, podrá aspirar a lo que usted quiera, a ser presidente de la nación, astronauta o lo que desee, mientras tanto, no puede, ni debe declarar ante nadie que su próximo paso es ocupar la silla que dejará Enrique Peña Nieto en el 2018, con qué blasones, con qué antecedente, ¡con qué cara!
Claro está que su ego se alimenta de aplausos, palmaditas en la espalda, halagos, de "sí señor, lo que usted diga", ó "tiene razón jefe"' esos estímulos que dañan la mente de cualquiera, ese servilismo que tanto daño le ha hecho a nuestro estado, caos que tal parece no ha pasado por los ojos de Padrés, simplemente, no se ha percatado.
Es una verdadera tristeza que nuestros gobernantes estén pensando en puestos futuros, en cómo seguir haciendo dinero, en cómo continuar abultando sus cuentas bancarias, sin siquiera haber terminado el trabajo en turno que les concedieron los ciudadanos con su voto, triste, lamentable, indeseable y grotesco.
Guillermo Padrés Elías fue un político de buenas intenciones, dicho por panistas de cepa, pero sus decisiones lo han enlodado, sus amigos han hecho de su gestión un desastre, su creciente egocentrismo lo ha encumbrado en la cima del problema más grande de Sonora y su lastimosa parsimonia lo ha hundido en la sima más profunda de sus debilidades.
Mientras el estado salpica podredumbre naciente de palacio de gobierno, el patrón pasajero del edificio cree que puede ser Presidente, sin antes entregar buenas cuentas a los sonorenses, sin antes gobernar para los sonorenses, sí, sin antes hacer su trabajo como debe ser.
Desde esta humilde, muy humilde tribuna invitamos a Padrés Elías a que deje de lado sus aspiraciones futuras, a que deje de pensar que las estafetas de candidato se logra venido de un trabajo soso, oscuro, lamentable, lo invitamos que se ponga a trabajar, pero en serio, que deje de lado sus amistades y ponga en puestos claves a gente capaz, y no a incapaces amigos que laceran su gestión.
El secreto a voces se desbordó, Guillermo Padrés Elías quiere ser presidente de México, lo dijo, lo exclamó, sin tener sustento, y lo peor de todo es que así, con lo que ha hecho, cree que puede, y sabe qué, lo hará...En fin, el que vive de sueños falaces envueltos en servilismos fabricados, termina por fracasar, allá ellos si así lo creen.
Listo, para ser domingo...Dios los bendiga, cuide y proteja.
Cualquier duda, aclaración ó crítica, mi correo es jessolfi@gmail.com
